Lo que podemos perder

En estos agitados dias de los vientos de guerra hay varios ejercicios que se pueden hacer y varias conclusiones a las que se puede llegar. He escuchado todo tipo de comentarios. Desde los mas patrioteros hasta la mas amplia gama de los pacifismos. De todo ello puedo concluir como dice León Gieco que la guerra "es un monstruo grande y pisa fuerte". Pobre León, que sería hoy de la Argentina si el borracho de Galtieri lo hubiese escuchado ( o quizas lo escucho, y no lo entendio).
Me parece, sin embargo, que ha faltado un poco de analisis acerca de lo que perdemos nosotros los chilenos con este conflicto de mierda.
Chile es un constructo mayor, que involucra la vida y las historias de todos, con sus aciertos y sus miserias, pero que dentro de su complejidad es posible detectar una constante.
Desde los años cincuenta Chile ha venido, desde distintas opticas, haciendo un esfuerzo constante por elevar los niveles de vida de nuestra población. Ese esfuerzo pertenece a todos, pertenece a mis abuelos que vivieron en la mas absoluta miseria del campesinado feudal, pertenece a mi padre que caminaba diez kilometros para estudiar, pertenece a mi madre que luchó por salir de su pueblo en busca de un mejor futuro, pertenece a mi infancia llena de carencias, pertenece a mi juventud ( llena de carencias ), pertenece a mi mujer que se fue de su pueblo para estudiar, pertenece al cartero que acaba de traerme las malas noticias de las cuentas. Pertenece a Alessandri, pertenece a Don Eduardo Frei, pertenece a Allende con sus porrazos, pertenece al primer Pinochet y a sus victimas ( no pertenece al posterior que quizo llevarselo entero para la casa para acabar con los reclamos insufribles de la insaciable Lucia que nada tenia de santa y que queria poder y mas poder, y mal gusto y sombreros y mas mal gusto). Pertenece a mis hermanos en la lucha por recuperar la democracia. Pertenece a nuestros presidentes. Al bueno de Aylwin que era el preciso para ese tiempo. Pertenece a Frei Ruiz Tagle y a sus amigotes. Pertenece a Lagos que se afirmó al caballo. Pertenece al ingenuo de Lavín. NOS PERTENECE A TODOS Y ES PARA TODOS.

Pero todo ese esfuerzo se puede ir A LA MISMA MIERDA, con una guerra absurda, que no nos sirve a ninguno de los paises y que nos mandaría de traste a los años cincuenta con una deuda imparable, con cesantía a niveles obcenos, con muchachos mutilados caminando por las calles.

Es de esperar que Lagos la maneje con soltura y que aguante los minutos finales de Toledo y que podamos terminar este maldito partido al que fuimos obligados con un perfecto empate a cero, que en este partido los goles son demasiado caros.