Mi generación debe haber compartido el mismo sueño en aquellas tardes eternas en las que sufriamos con la televisión de la dictadura con una programación insufrible. Soñabamos con una televisión que nos permitiera ver lo que nosotros quisieramos ver y en el momento que lo desearamos. A la carta, dicen hoy. Ese sueño realizado se llama YOU TUBE. Si no lo ha disfrutado en plenitud aprovechen de disfrutarlo
Acá va uno de los sonidos que me acompañó en mi juventud. Se lo debo a mi compadre Felipe Boye que me presto el cassete y yo le hice una copia que me acompaño por varios años.
Espero que se den el tiempo de disfrutarlo.
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